Entrevista realizada a Joseph O'Connor durante el Curso de Coaching que impartió en Madrid el mes de Noviembre. Esta entrevista ha sido publicada en el diario digital elpulso.es
El coach es el que pregunta y el cliente responde. ¿Qué tipo de preguntas hace un coach? ¿Cuál es la dinámica de la sesión?
El coach hace preguntas para clarificar la visión del cliente con el fin de que éste puede avanzar hacia delante. El cliente está buscando algo cuya respuesta desconoce, está buscando en lugares oscuros, lugares que conoce, pero en donde no está la respuesta, así que lo que hace el coach es iluminar esa oscuridad a través de preguntas que traen a la cabeza cosas que ayudan al cliente resolver el problema, conseguir el objetivo, tomar la decisión, lo que sea en lo que pueda estar interesado. Así que las preguntas exactas dependen del objetivo principal que el cliente quiera conseguir.
¿Qué estudia la Programación Neuro-Lingüística (PNL)?
La PNL se define como el estudio de la estructura de la experiencia subjetiva, y surgió de la mano de los estadounidenses John Grinder y Richard Bandler en los años 70. Empezaron a estudiar a los grandes comunicadores del momento, que eran principalmente terapeutas, con el fin de ver cuáles eran esos patrones que usaban que les hacían tan buenos comunicadores. Así que la PNL es una disciplina que trata de clarificar lo bueno de las personas, aquello que les hace brillantes y, a través de esto, la estructura de cómo piensan, y así, pensando de la misma manera, la gente podría comportarse de la misma forma, obteniendo similares resultados.
Mucha gente no distingue entre la labor de un coach personal y un psicólogo. ¿Cuáles son las principales diferencias?
Un psicólogo es alguien que ha estudiado psicología y que ha hecho un estudio académico. El Coaching integra ideas de la psicología académica, de negocios, de todo tipo de cosas que hace la disciplina muy pragmática para ayudar a la gente. Mucha gente estudia psicología para entender cómo piensa y actúan las personas. Un coach es alguien a quien llamas para que te ayude a ser lo mejor que puedas, actuar de la mejor manera posible en tu vida personal o en el ámbito laboral.
¿Existe un tipo de persona concreto del que pienses en la primera sesión que no va a ser posible ayudar?
No, esa persona no existe.
¿Crees que el coaching es una profesión reconocida?¿Reconocida por quién?
Una profesión se define por un número de cosas, una determinada estructura y estudio, una actividad concreta. Tienen la base de ayudar, pero no como lo haría un amigo, no se involucran en el problema, te cobran y te ayudan, y tienen un código ético y unos estándares a los que tienen que adherirse. El coaching no es aún una profesión en ese sentido, está trabajando en ello, pero no hay un reconocimiento internacional del coaching como una profesión, y la razón esencial es que es una disciplina joven, y mucha gente la confunde con terapia, o entrenamiento o consultorio... Así que, esperemos que en un futuro no muy lejano el coaching sea reconocido como una profesión.
¿Cómo te diste cuenta de que querías dedicarte a ser coach?
Fui músico durante muchos años, y fue entonces cuando empecé a interesarme por cómo aprende la gente y cómo pueden hacerlo lo mejor posible, especialmente en el ámbito del performance. Llegué a la conclusión de que la pregunta clave sobre cómo sacar lo mejor de uno mismo se podía aplicar tanto al ámbito de las artes como al de los negocios. Así que siempre he estado interesado en el proceso de aprendizaje de las personas y en todo lo que pueden sacar de sí mismos, y el coaching es una destacada y pragmática aplicación de ese interés que integra el resto de mis inquietudes, incluida la psicología, el PNL, y muchos otros.
Los asistentes al curso que estás impartiendo en Madrid reciben un certificado de la Comunidad Internacional del Coaching (ICC). ¿Qué significa formar parte de esta organización?
La ICC la fundamos mi mujer y compañera Andrea Lages, y yo en 2001, con la visión de desarrollar de forma ética la profesión del coach y, en este momento, la ICC integra alrededor de 6.000 miembros certificados de 59 países, y continúa certificando coaches. Llevamos a cabo alrededor de 100 entrenamientos al año en unos 17 países, y entrenamos coaches para que trabajen en el ámbito personal o de las empresas, o entrenamos gente a la que las herramientas del coaching pueden ser útiles, como psicólogos, managers, consultores, entrenadores, etc.
Has sido coach en distintos continentes. ¿Qué tipo de diferencias has encontrado entre las personas de distintos lugares mientras impartías las clases?
He impartido clases alrededor de todo el mundo y la gente es diferente, es algo cultural, así que deben adaptarse, y hay determinadas características culturales que hacen más difícil su adaptación al coaching, como por ejemplo en India, donde está la figura del gurú que se yergue como experto y que da consejo, mientras que un coach es alguien que explora con el cliente, no son gurús, no dan consejos, no son los expertos, así que es algo que puede chocar en esa cultura. Sin embargo, hay una estructura y una metodología del coaching de ayudar a otras personas que es universal, que funciona en todas partes, incluida India, simplemente algunas culturas deben adaptarse un poco más, en términos de cómo piensa la gente, y es que lo bueno del coaching es que tiene orígenes en todas partes, Norteamérica, Latinoamérica, Europa, así que tienes todas estas diferentes características culturales unidas, que es lo que da al coaching una fuerza tremenda que otras disciplinas no tienen.
¿Hay relación entre el coaching y la inteligencia emocional?
Sí, eso creo, ya que la inteligencia emocional mide cómo son las personas de inteligentes emocionalmente en las relaciones personales, cómo se conocen a sí mismos, cómo se llevan con otras personas, y un buen coach debe hacer esto también. Así que sí hay una gran relación entre ambas disciplinas, pero no sé lo suficiente sobre la estructura de la inteligencia emocional para ser capaz de profundizar en el tema.
¿Vas a volver el próximo año a España a impartir más cursos?
Eso espero, si me invitan. Supongo que PNL Madrid querrá hacer otro curso el próximo año. Yo desde luego quiero volver, el curso ha tenido mucho éxito y ha sido muy bien recibido.